Con la venia de este maravilloso medio de comunicación, he querido plasmar unas palabras sinceras de amor y de respeto por la vida y su contexto, como guía espiritual de la salud y como médico integrativo de este hermoso país, espero en conjunto aportar todo lo necesario al bienestar y la tranquilidad emocional de aquellas personas que buscan nuestro servicio, porque “yo soñaba que la vida era alegría y desperté y vi que la vida era servicio y comprendí, que en el servicio está la alegría”. R. Tagoré.

Por estos pensamientos he trazado en mi vida el carácter del servicio con alegría, ya que vivimos en un tiempo acelerado, lleno de estímulos, oportunidades y distracciones. El mundo moderno nos invita a correr, producir, compararnos y perseguir metas que muchas veces no nacen de nuestro interior, sino de expectativas externas, sin embargo, en medio de esta velocidad, persiste una verdad silenciosa, el ser humano continúa siendo el mismo ser esencial, frágil y valioso, lleno de anhelos, emociones, dudas, heridas y sueños, un ser que busca, desde lo más hondo, simplemente ser feliz.

La verdadera felicidad no se encuentra únicamente en lo que el mundo actual ofrece: logros, posesiones, reconocimientos, sino en la capacidad de descubrir lo maravilloso en cada instante, en cada persona y en cada experiencia, aun en medio de nuestras propias limitaciones. La vida cobra sentido, cuando aprendemos a observar con asombro…el aroma de una mañana simple, el abrazo que acompaña, el silencio que da paz, la oración que reconforta y reconecta, la risa que cura.
Pero esta búsqueda profunda, exige una mirada hacia adentro, requiere detenernos, escucharnos, reconocer nuestras luces y sombras, y abrazar lo que somos, sin máscaras, encontrarse consigo mismo en un camino que demanda sinceridad, valentía y paciencia. No se trata de alcanzar la perfección, sino de desarrollar nuestras virtudes, comprender nuestras emociones y dar forma a nuestros proyectos desde la autenticidad.

En este camino interior la presencia de Dios o del sentido espiritual que cada uno reconoce, se convierte en un FARO que ilumina sin imponer, que guía sin presionar, que acompaña en la fragilidad. Recordar nuestra finitud existencial no debe asustarnos sino impulsarnos, la vida es breve y justamente por eso es preciosa. Cada día es una invitación a vivir con propósito, a amar sin reservas, a contribuir con bondad y a valorar la diversidad de costumbres, historias e intereses que nos rodean.

Comprender que formamos parte de un sistema complejo, donde cada persona es un universo distinto, nos ayuda a ser humildes, más compasivos y conscientes. La convivencia con otros, lejos de ser un obstáculo se convierte en un espejo y una oportunidad de aprendizaje, de compartir, de perdonar, de crecimiento.

Vivir bien en el mundo actual significa: ser auténtico en medio de lo artificial, ser profundo en medio de la superficialidad, ser humano en medio de la prisa, ser espiritual en medio del ruido y ser consciente en medio de la distracción.
La vida plena no es un destino sino un recorrido continuo, un intento diario de equilibrio entre lo que somos y lo que aspiramos ser, entre nuestras raíces y nuestras alas, entre nuestra fragilidad y nuestra fortaleza, es un viaje hacia adentro el nirvana para poder vivir mejor hacia afuera.

Aquí les presento un extracto de mi libro VIDA PLENA, que continúo escribiendo para ayudar a vivir mejor en un mundo difícil por el caos, la desigualdad y la falta de amor por el egoísmo sin mirar a Dios.

“Yo soy John Jairo Villada López, hijo de dos maravillosos seres humanos Oscar y Rosita que ya no están con nosotros, y que fueron ejemplo de educación y servicio a toda la comunidad santarrosana, por esta razón especial he dedicado la mayor parte de mi vida al servicio voluntario y a continuar todo este legado de educación formal y de ayuda. Como médico integrativo, regenerativo, funcional, complementario he desarrollado varios métodos combinando conocimientos homeopáticos y naturales en el desarrollo de fórmulas magistrales ya aprobadas, para reconstruir el sistema gástrico digestivo, cuna de todas las enfermedades y que afecta a 9 de cada 10 personas en todo el mundo por los malos hábitos, el estrés, las emociones y los químicos existentes. Con la ayuda de excelentes laboratorios internacionales, estamos haciendo la notable diferencia con tratamientos seguros y eficaces, con mínimos efectos secundarios dando estadísticas e ingentes testimonios de total recuperación en pacientes desahuciados por la medicina convencional sin pronóstico ni diagnóstico reconocido. Somos un equipo fortalecido en el amor por los demás y la filantropía pura regida por el único deseo de servir con alegría.

La PLENITUD DE VIDA me lleva junto a un equipo de excelentes profesionales de salud y el bienestar, a seguir el camino de la co-creación de espacios transdisciplinarios, que desde ya ponemos a la orden de cada uno de ustedes, como es nuestra próxima Clínica ESBEL de Estética, Salud y Belleza en Santa Rosa de Cabal para todo el Eje Cafetero Colombiano y por otra parte ya estamos trabajando en la génesis de la organización No Gubernamental G10 MIRFC Colombia que se proyecta como una institución sin fines de lucro cuyo objeto social es brindar a personas, pacientes, profesionales y técnicos de la salud y el bienestar, familias, comunidades, instituciones y organizaciones de salud y bienestar, y a la sociedad en general, apoyo integral en diversas materias en atención y gestión en salud, que permitan contribuir al desarrollo sostenible, por medio de las ciencias de la salud y medicina alopática, naturopática, homeopática, regenerativa, integrativa, funcional, complementaria, entre otras.”

Contacto al WhatsApp: +57 318 3288687